En su último show oficial del año, LOS PERICOS lograron una fiesta de dos horas a puro hit en La Trastienda. No faltó ningún clásico y la respuesta de la gente fue excelente. Contaron además con la presencia de dos músicos invitados, que agregaron sus vientos a una banda que sonó muy ajustada.
Viernes a la noche en San Telmo. Hacía calor y había amenaza de tormenta. Pero nada de esto importó a los fans de LOS PERICOS, que llenaron La Trastienda y esperaban ansiosos el comienzo del espectáculo, pautado para las 22.
Bastante puntuales (a las 22.15) se corrió el telón y aparecieron en escena. JUANCHI BALEIRON saludó con un “Buenas noches, está lindo para la fiesta” y largaron con “Planeta de mentiras”, el más reciente corte de su último álbum,”7”.
El escenario estaba decorado con unas luces muy particulares: eran tambores de lavarropas adaptados para hacer de lámparas; y en el fondo había un hexágono luminoso que hacía recordar a un Simon, con luces intermitentes rojas, verdes y azules.
Después de agradecer, JUANCHI agregó: “Estamos muy contentos, este fue un año increíble para nosotros”, y desató los aplausos del público. Sin duda hacía referencia a la gira que los llevó por varios países de Latinoamérica y hasta la “gran manzana”, cuando dieron un recital en el BB King Theatre de Broadway. “Home sweet home”, “Monkey Man” y “Nada que perder” fueron los siguientes temas.
A esta altura la gente ya estaba enganchadísima con el show, que seguía con el clásico “Movida rastafari”. Es interesante ver como un frontman que no habla mucho durante la función logra tener tan buena comunicación con el público, que se sorprendió con “Corazón de bruja”.
Dos temas sufrieron pequeñas modificaciones en su interpretación: “Mucha experiencia” y “Pupilas lejanas”, pero sonaron muy interesantes en un ritmo diferente.
“Si te vas”, “Boulevard” y “La ciénega” dejaron paso a un mini recreo acústico donde arriba del escenario solo quedaron JUANCHI y los hermanos DIEGO y MARCELO BLANCO para interpretar “Ocho ríos”. Al trío se sumó luego el saxofonista HORACIO AVENDAÑO.
Lentamente volvieron el resto de los músicos y de ahí en más fue una seguidilla de hits, canciones que sabemos todos y que inevitablemente llevan a mover el pie o bailar desaforadamente. Todos los concurrentes lo hacían, incluso un grupo de oficinistas que estaba en el fondo del salón.
Difícil resistirse cuando suenan “Waitin”, “Runaway”, “Llegaste al final”, “Complicado y aturdido”, “Hacé lo que quieras”. Los seguidores cantaban y bailaban sin parar y en un momento de silencio aprovecharon para colar su grito: “Pan y vino, pan y vino, el que no grita Pericos para qué carajo vino”.
Cuando el cantante presentó a los miembros de la banda, destacó y agradeció a los dos invitados: un saxofonista y un trompetista, a quien elogió: “lo tenemos porque es el mejor del país”.
En una elección de covers ochentosos, primero hicieron “Estallando desde el océano”, de SUMO. Continuando con su propio repertorio siguieron “Fácil de engañar”, “Eu vi chegar” y “No me pares”. Se acercaron a saludar pero se fueron solo un momento, ya que faltaban los bises, que vinieron minutos después con “Más de mi” y otro cover, en este caso de SODA STEREO con “Corazón delator”.
El final llegó con “Casi nunca lo ves”.
Así pasó la tercera presentación del año de la banda en La Trastienda. Si bien hubo saludos y deseos de un feliz año nuevo, todavía les queda otro show en diciembre, en el que presentarán el tema ganador del concurso del suplemento S!, “El jueves soy hormiga”, al que le pusieron la música. LOS PERICOS cerraron otro año, con la formación de siete integrantes absolutamente asentada y preparándose para iniciar el próximo, que traerá un nuevo disco de estudio, probablemente a mediados de 2007. Antes deben completar otra parte de la gira, que terminará en marzo.
Fuente: El Acople